El resplandor: King vs Kubrick

Precedentes: los autores

Stanley Kubrick es insuperable. Y también lo es King. Y hasta cierto punto rivalizaron en la elaboración de The Shining. Stephen King nunca quedó conforme con su adaptación. Y seguro hay opiniones para todos los gustos. Pero lo cierto es que King volvió a crear otra historia magnífica. Eso, sin lugar a dudas. Y Kubrick, hablando de su calibre cinematográfico que lo precedió, hizo de El resplandor una notable adaptación cinematográfica.

Pero no olvidemos que fue Stephen King quien ideo El resplandor (1977). De alguna forma podemos decir que parte con ventaja. Porque las dos obras son muy discutidas y hasta cierto punto diferentes y por eso es que tantos se comparan. La obra de Stephen King fue su obra número tres. Eso significa mucho, porque su obra es ingente y en ella se ven reminiscencias, por ejemplo, de la propia It (1981). El monstruo de las dos obras representa varias caras, diferentes y ninguna tiene que ver con la original. ¿Cuál es la verdadera?

Stephen King, el autor. Foto: IMDb.

Kubrick había creado hasta la fecha (1980), nada más y nada menos, que algunas de sus películas más importantes: Senderos de gloria (1957), Espartaco (1960), Lolita (1962), Teléfono rojo (1964), 2001: Una odisea del espacio (1968), La naranja mecánica (1971), o Barry Lyndon (1975). ¿Podemos ya parar a respirar? Vamos, podemos decir que, hasta ese momento, Kubrick había desarrollado la mayor parte de su obra cinematográfica.

¿Pero cuáles son las principales diferencias entre la novela y la película?

La novela tiene un componente psicológico mayor. Pasa lo mismo que con la mayoría de libros. Se da más espacio a los antecedentes familiares y personales de los personajes. Asimismo, en el libro podemos ahondar más en un componente maléfico del hotel que no se aprecia tanto en la película. En esta, el personaje de Jack Torrance se desarrolla como un ente decadente que se va viendo atrapado por el hotel y va siendo despojado de su humanidad por no sabemos bien qué. Aunque intuimos que el Overlook no es el mejor lugar para quedarse en el más crudo de los inviernos.

Stanley Kubrick y Jack Nicholson durante el rodaje. Foto: IMDb.

Por otro lado, el señor Halloran es desarrollado más en el libro y su incidencia sobre los personajes protagónicos y sobre Danny principalmente es mucho mayor. Queremos a Halloran, y queremos que pueda llegar a tiempo a ayudar a la familia. Y específicamente a Danny, un personaje misterioso con un resplandor como pocos y compartido por un puñado de personas en el mundo, entre ellos, el propio Halloran. El de Danny es un personaje fundamental y sorprendente, bien en el libro, bien en la película.

La familia Torrance. Foto: IMDb.

Asimismo, Winifred, Wendy para los amigos, también tiene más importancia en la obra de King que en la de Kubrick. Sin desmerecer a Shelley Duvall (bueno, tal vez un poco), el personaje maternal que aparece en el libro es mucho más consistente, más creíble. Pero, si se me permite, quienes hayan visto la película además de en su versión original, el doblaje en castellano no deja de ser al menos peculiar y hasta inseparable de la propia cinta. Pero no, Shelley Duvall no es quien querríamos ver encarnado a la desvivida y preocupada Wendy.

Y cómo no hablar de Jack Torrance… Es que Jack Nicholson está fantástico. Y aunque también percibamos diferencias entre el personaje del libro y el que interpreta Nicholson, lo cierto, es que están muy bien. Los aceptamos y los queremos. Jack y Jack están fantásticos. Los dos.

Jack Torrance en un acceso de locura. Foto: IMDb.

King o Kubrick

El resplandor de King es más malicioso. El nivel de devastación del final de la novela es mayor que el de la película, pero sobre todo el libro incide en cómo el hotel influye en las personas para lograr sus maléficos fines. Y más allá de que permita ahondar en otros terrenos que la cinta por cuestiones de metraje no pueda, Stephen King nos da una obra con un ritmo perfecto, en el que nos sumergimos sin darnos cuenta hasta que terminamos las páginas en un santiamén. Con Kubrick disfrutamos de las imágenes creadas a partir de su propia visión (cambiando cosas que al final no son tan trascendentes), sin que se desvirtúe la idea original de King, y aportándose elementos que no cambian sustancialmente la historia.

Fotograma de El resplandor. Foto: IMDb.

Ambas versiones se complementan y diferencian, de forma amable. Pero siempre podrán quedar disquisiciones y pareceres dispares con los que quedará la eterna disputa sobre quién hizo la mejor versión de The Shining. Si King o Kubrick. Pero no olvidemos, de quién es esta historia.

Conclusiones: ¿Libro o peli?

Las conclusiones son las obvias. La película y el libro son en esencia la misma historia. Se trata de una adaptación y no de una libre interpretación. Si bien, si hay cosas que son algo diferentes y, sobre todo, discutibles, la película sigue al libro. Y aunque las opiniones al respecto puedan ser muy variables, tanto el formato literario como el cinematográfico son, más que recomendables, necesarios. Al punto en el que nos encontramos ahora, en el 2020, no pueden existir la una sin la otra, no puede disfrutarse la historia de El resplandor sin visionar la película y sin leer el libro. Ambos son muy muy asumibles, se disfrutan al extremo y no, no podemos elegir entre uno u otro. No ahora, no en este punto. Lee y deléitate, con el libro y con la película.

LIBRO: 9.

PELÍCULA: 9.

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